Antes de nuestra era. Siglo XII: primera referencia a Israel. Una estela egipcia celebra la devastación de un grupo con ese nombre. Siglo VII: se consolida un estado hebreo alrededor de la tribu de Judá y la dinastía de un fundador, David, y su capital, Jerusalem. Esa tribu y ese linaje derrotaron al benjaminita Saúl. De sus competidores, tribus también hebreas, en el norte, se encargaron los asirios. El pequeño poder regional duró poco, suficiente para burocratizar un culto monolátrico, y justificar su predominio a través de textos que realzaban la figura de David.